Cómo enamorarse de la persona correcta y no morir en el intento...

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Lectora fiel de Vogue y amante de los zapatos de tacón.Escritora a ratos.Bastante imperfecta.Ésta es mi historia y la vivo como quiero.

jueves, 16 de enero de 2014

Desvaríos a medianoche.

Para que os voy a mentir, a mi el rollo ese de "Buenos días princesa" no me ha gustado nunca. Prefiero un "Buenos días nena, ven aquí que te voy a comer entera"... ESO SÍ son buenos días.
El amor es bonito, supongo vamos, yo no lo sé, nunca he tenido suerte en eso, pero tampoco lo he tenido en el juego,así que quizás sea verdad eso de que la suerte no existe, solo hay que buscarla. Y creerme que la busco, pero nada, debe estar escondida en mi armario, al fondo, detrás de todos los abrigos.
O quizás mi suerte tenga nombre y apellidos, o quizás no y estoy desvariando y poniéndome romántica solo por la hora que es y por mi falta de sueño. O quizás mi falta de sueño se deba a que no tengo unas manos que me abracen por la noche, que me quiten los miedos, las dudas y la ropa...
En cualquier caso, esperaré, probablemente mi suerte aparezca cuando decida arreglarme el armario,¿no?

M!




domingo, 31 de marzo de 2013

¡Vuelvo a escribir!

Hacía tanto que no escribía... pero he vuelto.
He pasado unos meses raros,pero por primera vez en mucho tiempo estoy bien,no puedo decir que feliz del todo porque como siempre digo "No hay felicidad completa ni tristeza eterna."  

Estoy bastante bien,no tengo pareja pero,¿y qué? ¿es necesario tener pareja para estar feliz? Sinceramente no lo creo.
Pienso que  primero tenemos que hacernos felices nosotros mismos para dejar que otra persona también nos pueda hacer feliz.
Primero uno mismo,después los demás.
A alguno les parecerá una postura algo egoísta,pero pienso que no debemos de dejar nuestra felicidad en manos de nadie,porque entonces es ahí cuando lo pasamos mal,cuando nos damos cuenta de que la otra persona no va a cumplir nuestras expectativas.

Así que hay que intentar sonreír cada día,aunque sea un momento,no hay nada mejor en la vida que una sonrisa,que un momento de risas,un momento de felicidad...

Bonitas sonrisas a todos.

M!


domingo, 14 de octubre de 2012

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Ayer pasé un día estupendo...hacía mucho que no tenía un día así,que no estaba verdaderamente contenta y feliz.

Me fui a Madrid con mi prima Silvia y su marido Iván,bueno y dos amigos de ellos muy simpáticos.
Quería ir para conocer a dos amigas que conocí en twitter, Romina y Sofía.
Después de tanto tiempo hablando,ya tocaba, y bueno...son increíbles. Estuve súper agusto con ellas y no quería despedirme. Son tan simpáticas y guapísimas,y para mi era tan importante verlas... y lo conseguí,por una vez algo me salía bien! 
Esta es la primera de muchas que nos veremos... la siguiente en Marzo,y esta toca en mi ciudad,Valencia.Y aunque aún queden algunos meses,el tiempo pasa rápido,y ya estoy deseando volver a verlas.

Continuamos nuestra visita por Madrid,y nos encontramos con Mario Vaquerizo,que se hizo una foto con nosotros... es tal cual sale en televisión,es majísimo y muy amable. Si ya me gustaba,ahora me gusta muchísimo más... 

Proseguimos por Madrid,esas calles llenas de gente,en las que es imposible sentirse solo, el metro,lleno de gente algo atípica,sus edificios tan impresionantes, su milla de Oro...increíble. Prada,Chanel,Dior,Jimmy Choo... estaba en mi salsa.

Me llevaron a la Exposición de Alta Costura de Jean Paul Gaultier,me pilló por sorpresa,no me quisieron decir donde íbamos,pero sabían que me encantaría,y acertaron... me encantó!!

Y después de todo el día andando por Madrid tocaba volver a casa... 
Aunque mereció la pena esas cuatro horas en coche,fue un día para no olvidar y de hecho no lo haré. Espero volver pronto,me queda mucho Madrid por ver... aunque sé que no se va a mover de ahí.

Besos. M!

domingo, 2 de septiembre de 2012

Septiembre...

Huele a Septiembre. A cambios.

Al menos eso espero. Cambios.Porque los necesito.

He pasado el peor verano de mi vida. He perdido a una de las personas que más quiero,con la que he pasado todos los días de mi infancia, toda una vida...

Recuerdo cada momento que he pasado con él. Las canciones que le cantaba,cada abrazo y cada beso.No recuerdo que alguna vez me haya regañado,era su "chiqui" siempre estaba de mi parte.
Me acuerdo de todas las veces que he visto la televisión acurrucada a su lado en el sofá.Tapados con una manta,que por cierto quiero quedarme.Igual que su batín y su pijama.Ah y las gafas de sol que aún huelen a él. Recuerdo que sentados en el sofá me sentía tan bien,tan protegida,tan pequeña. Tan feliz.

Me pase los meses de junio y julio cuidandolo en el hospital,desde por la mañana hasta por la noche,pero no me arrepiento de nada. Él me cuido a mi cuando yo era pequeña,yo tenía que cuidarlo ahora.No por obligación,si no porque yo quería. He podido compartir con él los últimos meses,los últimos días.
Hicimos una promesa,y aunque no pude cumplirla estando él vivo,la cumplí de todos modos llevandomelo conmigo...
Porque lo que prometo lo cumplo.Y por él habría hecho cualquier cosa.

Y aunque ahora sienta un vacío enorme en el pecho y apenas duerma por las noches,sé que ahora está en un lugar mejor. Y que desde arriba me mira y nunca me dejará sola.Aunque yo me sienta terriblemente sola.

Sigues en mi abuelo. Te quiero y te querré.


M!

miércoles, 18 de abril de 2012

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Antes que nada, perdona si huele un poco a cerrado, hacía mucho tiempo que nadie se alojaba aquí, y menos aún con la intención de quedarse. Ábreme bien de puertas y ventanas. Que corra el aire, que entre tu luz, que pinten algo los colores, que a este azul se le suba el rojo, que hoy nos vamos a poner moraos.
Y hablando de ponerse, vete poniendo cómoda, que estás en tu casa. Yo, por mi parte, lo he dejado todo dispuesto para que no quieras mudarte ya más.
Puedes dejar tus cosas aquí, entre los años que te busqué y los que te pienso seguir encontrando. Los primeros están llenos de errores, los segundos, teñidos de ganas de no equivocarme otra vez.
El espacio es tan acogedor como me permite mi honestidad, ni muy pequeño como para sentirse incómodo, ni demasiado grande como para meter mentiras.
Mis recuerdos, los dejé todos esparcidos por ahí, en cajas de zapatos gastados y cansados de merodear por vidas ajenas. No pises aún, que está fregado con lágrimas recientes, y podrías resbalar. Yo te aviso.
El interruptor general de corriente está conectado a cada una de tus sonrisas. Intenta administrarlas bien y no reírte demasiado a carcajadas, no vayas a fundirlo de sopetón.
No sé si te lo había comentado antes, pero la estufa la pones tú.
Y hablando del tema, he intentado que la temperatura del agua siempre estuviera a tu gusto, pero si de vez en cuando notas un jarro de agua fría, eso es que se me ha ido la mano con el calentador. Sal y vuelve a entrar pasados unos minutos. Discúlpame si es la única solución, es lo que tenemos los de la vieja escuela, que a estas alturas ya no nos fabrican ni los recambios.
Tampoco acaba de funcionarme bien la lavadora. Hay cosas del pasado que necesitarán más de un lavado, es inevitable. Y hay cosas del futuro que, como es normal, se acabarán gastando de tanto lavarlas. La recomendación, ensuciarse a su ritmo y en su grado justo. Eso sí, no te preocupes por lo que pase con las sábanas, que las mías lo aguantan todo.
Para a acabar, te he dejado un baño de princesa, una cama de bella durmiente, un sofá de puta de lujo y algo de pollo hecho en la nevera. Para que los disfrutes a tu gusto, eso sí, siempre que sigas reservando el derecho de admisión.
Aquí no vienes a rendir cuentas, sino a rendirte tú. Aquí no vienes a competir con nadie, sino a compartirte a mí. Y lo de dar explicaciones, para el señor Stevenson.
El resto, no sé, supongo que está todo por hacer. Encontrarás que sobra algún tabique emocional, que falta alguna neurona por amueblar, y que echas de menos, sobre todo al principio, alguna reforma en fachada y estructura.
Dime que tienes toda la vida, y voy pidiendo presupuestos.
Dime que intentaremos toda una vida, e iré encofrando mis nunca más

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